LAS FIESTAS DEL 1° DE ENERO

Como todos los Cumbreros sabemos, el 1° de Enero de cada año se realiza una celebración dedicada especialmente a los niños, pero que también incluye juegos y actividades en la que los adultos participan. Entre los principales competencias están: las carreras de burros, carreras en sacos, huevos en cuchara, maratón, carreras de bicicletas, entre otros, cabe destacar que el dinero de los premios y la organización son recolectados entre los visitantes, por Eleadez Ugas e Iris León (principales organizadores del evento).

La gente comienza a reunirse desde temprano, incluso los que amanecieron ebrios aparecen con cara de pescado manido (pescao manio) con sus familiares y amigos a buscar puesto en los alrededores del Bar de Valentin.

Pescado Manido (pescao manio), para los que no saben, es el pescado con los ojos colorados y profundos, de apariencia y olor desagradable justo antes de entran en proceso de descomposición.

Lo que más me llamo la atención a parte del excelente clima (medio nublado, con mucha humedad y una brisa fría que muchos toman como excusa para beber Contra con Ron Pajarito hasta caer por muertos), y la gran cantidad de gente de otros pueblos vecinos fue una especie de maratón bailable propuesto a última hora por los organizadores.

¿EL MARATON BAILABLE?

En este atípico maratón, los participantes tendrían que recorrer aproximadamente 2 kilómetros detrás de un vehículo con música a todo volumen, mientras ejecutaban sus mejores pasos de baile. La sorpresa la inscripción de la Sra. Celsa con algunos 85 años de edad, los favoritos Yito y Nango.

Así comenzó la competencia, en la primera vuelta ya se veían los participantes que abandonaban debido a lo exigente de la prueba, Yito a la punta no paró de bailar y llegó al final como ganadora absoluta junto a Alvaro, Nango luego de algunos reclamos le dieron un premio de consuelo de 20 bolívares (tenía un aspecto verdoso, algunos decían que era un ataque de lombriz).

Todos se preguntarán que paso con la Sra. Celsa, le cuento que la señora no ganó nada, aunque cumplió con todo el recorrido. Semanas más tarde me enteré que se le había derramado el líquido de una de sus rodillas, se le había desplazado dos discos de la columna, además de una gripe infernal que casi termina con su vida. Actualmente se encuentra estable de salud, y dice que el próximo maratón no se lo gana nadie.

A pesar del malestar producto del desaforo del 31 de diciembre que término en mi casa a las 10 de la mañana con un sancocho hecho en leña en compañía de mis amigos de pea y que Paito (Francisco Chico Ugas) amenizó con sus canciones, pude capturar algunas imágenes las cuales comparto con todos ustedes.